Llevo varios meses dándole vueltas a esta idea que escucho muy a menudo tanto en las personas con las que hablo como en casi todos los podcasts y la comentocracia que suelo escuchar, estos dos conceptos “La Gente” y “La sociedad”, estas dos ideas etéreas y abstractas en mucho sentido a la cual se suele referir para dar esta idea de que hay un ente formado por un cúmulo de voluntades y consciencias más o menos homogéneo que se construye y actúa por sí mismo y que nos afecta a nosotros como individuos, pero deconstruyamos la idea de lo que quiero transmitir en este documento.

La gente

¿A qué es a lo que se refiere alguien cuando habla de la gente?, ejemplo: “Lo que la gente debería saber…. “o “La gente actúa de tal o cual manera . . . ¨

Es la pregunta que me tuvo dando vueltas a la cabeza, puesto que quien lo habla, pareciera que se excluye de la gente, se pone como un agente externo que puede salirse de ese conglomerado que él/ella le llama “La Gente” para poder entonces hacer comentarios, juicios, o puntualizaciones” que desde su perspectiva describen, juzgan o dictaminan esa creencia, acciones, ideologías, ignorancia o decadencia de la cual se habla o se refiere. Pareciera entonces que este que habla de la gente, tiene algún tipo de manto liberador y excluyente del cual hace uso para poder entonces ser alguien aparte que no forma parte de ese conglomerado “La gente”.

La sociedad

Siguiendo la misma línea de aquellos que nombran a la sociedad, ejemplo; “Esta sociedad en la que vivimos nos dice que tal o cual. . .” o “En estos tiempos la sociedad genera presión para dar o hacer de cual o tal forma . . .” Pero y entonces ¿Qué es la sociedad? O dicho de otra manera ¿Quiénes son la sociedad? Lo son los otros y otra vez el que lo dice se auto excluye y toma un papel de observador o narrador que al estar “fuera de la sociedad” puede juzgarla, narrarla o condenarla a ser de tal o cual manera o bien a denunciarla que esta nos hace daño, que nos afecta en las relaciones o perder nuestro sentido de individualidad por vivir en una sociedad con marcos estructurales definidos y lo que se salga de ahí no se es permitido.

Fenómenos sociales

No estoy diciendo que esto no exista, que hay una serie de condiciones que se han ido creando a partir de la interacción de personas que formamos la sociedad(donde todos estamos dentro y me incluyo claro), y que somos la suma, multiplicación y división de miles de años en voluntades e intereses individuales que han ido moldeando sin un patrón necesariamente planeado, pero que justo es algo que se estudia en sociología y que son los “fenómenos sociales”, pues es prácticamente imposible (al menos en nuestros días) planear y gestionar con éxito objetivos sociales que impacten positivamente en lo social y al mismo tiempo en las vidas subjetivas de los individuos.

¿Semántica?

Tal vez sea solo cuestión de semántica, que es más fácil referirse a estos conceptos desde la auto exclusión para poder entonces ser crítico y observador desde la posición de tercera persona, de esta manera entonces se podría ser más “objetivo” o al menos parecerlo, y así entonces emitir juicios denuncias o condenas no siendo parte de “la gente o la sociedad”

Auto inclusión

Ahora bien, ¿qué pasa si aquel que está narrando se incluye? ¿Dejaría de tener validez sus juicios, observaciones y comentarios?, pues este también forma parte de estos entes sobre los cuales hace dichas observaciones; o tal vez sea más veraz a la luz de los que le escuchan, puesto que, sin temor a dudas aquel que narra, forma parte de “la gente”, es uno más del resto de individuos que forman “la sociedad”.

Somos parte innegable de la gente y la sociedad

El vernos como parte de la gente y la sociedad, nos lleva de manera casi automática a la reflexión misma que justo yo soy parte activa de esa gente que debería saber, o hacer o reclamar, o lo que sea. Si es muy posible que el observador que narra esto, haya observado ya tal o cual cosa, sin embargo, el auto excluirse detiene su reflexión y entonces se sube al pedestal de la verdad y deja de reflexionar y saca su conclusión, y como aquella frase que se le atribuye a  Albert Einstein; Solo cuando te has cansado de pensar, sacas conclusiones”.

Somos nosotros como individuos subjetivos e incongruentes que formamos la sociedad, con todos sus aciertos y sus fallos, que si bien somos manipulados por diversos medios, construidos para funcionar, para generar productividad y ganancias, somos nosotros a nivel individual quienes tenemos el poder de modificar los resultados de lo que cada día, a cada hora y con cada acto, se transmuta en una sociedad más “sana” usando el termino en su condición de beneficiosa para el colectivo y para el individuo al mismo tiempo.

O somos también nosotros los individuos los que pensamos que alguien más debería hacer los cambios para tener una mejor sociedad, es ahí donde seguimos jugando el juego de dejarle la responsabilidad de mi vida y la de los demás en alguien más, cuando recae en mí mismo, por mí y por los otros, que, dicho sea de paso; son una extensión de lo que yo soy, pues yo los completo y ellos a mí.

No es la gente o la sociedad

No es “la gente o la sociedad”, en palabra de Ortega y Gasset; “Soy yo y mis circunstancias”, en este sentido yo formo parte co-creadora de mis circunstancias, es decir yo soy parte de la gente y la sociedad.

César Alemán

28 | Abril | 2025